Playa del Matorral - Cómo llegar y su ubicación en Fuerteventura
Playa del Matorral

Playa del Matorral

Con una longitud de 3 kilómetros que se extienden sobre la hermosa costa sur de la isla, la playa del Matorral es una de las mejores playas de Fuerteventura, además de una de las más grandes y populares.

También conocida como playa de Jandía, playa de la Solana o playa del Saladar, la playa del Matorral está cubierta por arena fina y dorada que se extiende sobre una costa interminable con un aspecto prácticamente virgen a pesar de encontrarse envuelta por una importante infraestructura hotelera.

Un paseo por la orilla

La playa del Matorral se encuentra en un Espacio Natural Protegido desde 1994 y cuenta con una bien merecida Bandera Azul gracias a sus excelentes condiciones medioambientales y a la gran calidad y cantidad de sus servicios.

En el centro de la playa se alza el majestuoso Faro de Morro Jable, una delgada torre blanca de 60 metros de altura que, además de servir como guía para los navegantes, marca el punto en el que comienza (o finaliza) la zona nudista de la playa.

Al tratarse de una playa tan extensa, la playa del Matorral cuenta con zonas muy diversas adaptadas a todos los gustos, desde las partes más tranquilas, ideales para tomar el sol, hasta las zonas con mayor movimiento donde se pueden realizar todo tipo de deportes acuáticos.

Un espacio natural incomparable

En la parte de la playa localizada cerca del faro se encuentra el Saladar de Jandía, un espacio natural protegido con un peculiar ecosistema capaz de sobrevivir a las inundaciones sufridas por las subidas del mar.

En esta zona, las plantas que quedan sumergidas bajo el agua del mar cuentan con hojas gruesas que son capaces de contener el agua que sabiamente separan del exceso de sal que obtienen.

Además del indudable atractivo natural que envuelve a la playa del Matorral, este es solo la punta del iceberg, ya que, sumergido bajo sus aguas cristalinas, se encuentra un hermoso mundo paralelo formado por una pared vertical rodeada por cuevas en las que habitan infinidad de especies marinas, por lo que resulta el lugar ideal para la práctica del submarinismo.